José Luis Bermúdez

Fontanero

 

 

Nace en Toledo el 13 de octubre de 1952, el mismo día que se inaugura, en Nueva York, la nueva sede permanente de las Naciones Unidas (ONU).

 

Es fontanero, es decir, un artífice que encaña, distribuye y conduce las aguas para sus diversos usos, según el Diccionario de la Lengua Española.

 

A los 16 años inicia su oficio en un taller ubicado en la Calle de Alfonso XII, que ya no existe. Hace reparaciones, instalaciones y reformas en los hogares toledanos. Pocas tareas mas nobles, necesarias y benéficas que la de facilitar el consumo y aprovisionamiento de agua, liquido elemento de capital importancia, para la supervivencia de los habitantes, en este caso, del milenario peñón.

 

Tiene una llave inglesa entre las manos, pero su rostro es inequívocamente meridional, mediterráneo; su bien poblada barba, bigote y cabellera, oscura, densa, enmarañada, su mirada profunda y distante, bien pudiera enmarcarse en el palacio árabe de un notable toledano El tiempo parece detenerse en este artesano, que lo mismo hubiera podido trabajar con Juanelo Turriano, que investigando el intrincado laberinto de los aljibes toledanos, o verificando las canalizaciones romanas; pero al que preferimos imaginar, dirigiendo el lento y melodioso fluir del agua, de los patios del Toledo musulmán.

 

 

 

                                                           Rafael Sánchez de San Román